Hace unos años el destino quiso
premiar al pueblo de Albelda de Iregua
con la presencia de dos vecinos muy singulares en su campanario, se trataba de una
pareja de cigüeñas. Le habían cogido tanto cariño al pueblo que ni emigraban a
otros sitios.
A ratos se les oía emitir esos
ruidos tan característicos con su pico, otras veces las veías sobrevolar el
pueblo produciendo una sombra gigante, incluso en una ocasión pude ver a una de
ellas cazar una culebra en el Iregua, ¡que gracioso ver como se le enrollaba en
el pico!
Hace un tiempo descubrieron que
la iglesia se estaba hundiendo y empezaron a construir una nueva en otro
emplazamiento, esta mañana trasladaban las campanas de la iglesia vieja, a la
nueva y lo que para muchos era un motivo de alegría para otros se ha convertido
en tragedia.
Las cigüeñas han sido
desahuciadas, lo primero que han hecho los operarios ha sido tirar el nido al
suelo.
Éstos son los restos del nido entre las máquinas.
Que triste la imagen de los dos pájaros mirando desde una grúa cercana.
¿Realmente no había otra forma
de hacerlo?
Si hace ya tiempo que estaba
previsto el derribo de la torre ¿Por qué no se ha tenido en cuenta el destino
de éstos animales? que por cierto, están protegidos en La Rioja desde 1990.
Desde aquí invitamos al
Ayuntamiento a instalar un par de postes donde puedan anidar y todos
nosotros disfrutar de su presencia.
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